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El hospital del Toráx



Jardines interiores del hospital


Hablar del hospital del Tórax es hablar de uno de los lugares con mayor actividad paranormal en toda España y el mundo. El misterio y la leyenda, envuelven a uno de los edificios más estudiados por los seguidores de lo desconocido. Ubicado a las afueras de la ciudad de Terrassa, su historia está llena de tragedia y dolor. Construido principalmente para aquellos pacientes con afecciones pulmonares de carácter muy grave (tuberculosis, cáncer de pulmón, etc.), todos los pacientes que ingresaban se sentían desahuciados, abandonados y se sumergían en una profunda depresión por la cual, se registraron cientos de suicidios de internos, incluso niños, que se lanzaban al vacío desde la novena planta para caer en el jardín, apodado "La Jungla".


 La jungla

El edificio constaba de dos alas con nueve plantas; una de las alas era para los trabajadores y en sus habitaciones se hacinaban hasta seis pacientes que disponían de seis lavabos propios pero con cuarto de baño comunitario. También poseían taquillas para las pertenecías fuera de la habitación y terraza comunitaria. Los pacientes que entraban solían permanecer aislados del exterior durante todo el tiempo que pasaban en el hospital, teniendo como único contacto con el exterior las cabinas telefónicas y la emisora de radio que también pertenecía al centro. Estaban desconectados del mundo.

 Interior del hospital, los pasillos

La lenta y dolorosa agonía de los enfermos terminales los conducía al suicidio o a la locura, por lo que el promedio de estancia de un paciente en el hospital era de un año o menos. Con toda esta historia negra, hoy el hospital está lleno actividad paranormal. En sus pasillos se han grabado sombras, susurros, voces y lamentos de las almas que deambulan aun por sus estancias.  Ahí mismo se han grabado escenas de varias películas como Ouija o Los sin nombres y El maquinista que fue rodado en su totalidad en el interior del hospital y que en palabras del director "es un lugar espeluznante".

Algunos hallazgos en este hospital son ciertamente inquietantes: camillas, computadoras, archivos, y restos de miembros amputados y fetos conservados en formol, son localizables entre la segunda y la quinta planta. A pesar de ser un hospital, estos restos nada tienen que ver con la medicina que se practicaba en su interior y se desconoce el propósito de tan macabras muestras y el porqué fueron abandonadas, aunque algunas especulaciones afirman que son restos de posibles experimentos.
 
 Los fenomenos paranormales ocurren con frecuencia

 Tras el cierre total del centro y ante las declaraciones de algunos de los residentes, muchos investigadores centraron sus miradas en este centro donde se obtuvieron unos resultados estremecedores, ya que se han realizado sesiones de Ouija muy intensas así como algunas de la psicofonías más claras del mundo. Asimismo la actividad más intensa se da en las plantas 4, 5 y 9 donde la sensación de ser observados es continua, y se han descrito muchas apariciones, especialmente en las habitaciones infantiles de la 5ª planta.

 
 La capilla




Otro lugar de especial interés es la capilla, donde se suelen producir rituales relacionados con el satanismo, y donde los equipos de filmación y fotografía no suelen ser útiles ya que las baterías misteriosamente se suelen agotar nada más entrar. En el jardín, donde muchos acabaron sus días, afirman que es habitual escuchar voces, gritos, e incluso, algunos aseguran haber visto personas saltar desde la ventana del noveno piso sin que hallaran posteriormente ningún cadáver.

Cierto o no, el hospital del Tórax es por sí mismo y su historia un lugar terrorífico.






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